Dos diputadas de la oposición observaron ayer que la comisión mixta de la Asamblea Legislativa, controlada por el MAS y la Fiscalía General son “comisiones de limpieza” de la imagen del presidente Evo Morales, pues cerraron el paso a la investigación sobre el supuesto tráfico de influencias en la adjudicación directa de millonarios contratos estatales a la empresa china Camce. El MAS dice que son voces de decepción porque la oposición no encontró indicios de corrupción. En tanto, la defensa de Zapata dice que vulneran 80 por ciento de sus derechos al mantenerla presa.
La jefa de bancada de Unidad Demócrata (UD) en la Cámara de Diputados, Lourdes Millares, dijo a la red Erbol que la comisión redujo su trabajo a ser una calificadora de procedimientos en la adjudicación de contratos a Camce y aseguró que hasta ahora “el trabajo ha sido pobre”, porque sólo hicieron inspecciones, una tarea que no es de fondo.
Recordó que la comisión fue conformada a solicitud de Morales para que lo investigue si hay indicios de tráfico de influencias, pero la mayoría del MAS desvió el objetivo haciendo “limpieza” previa de toda la documentación, para evitar que la oposición encuentre alguna irregularidad.
Explicó que el fiscal, Ramiro Guerrero, hizo lo mismo porque tampoco investiga el tráfico de influencias, enriquecimiento ilícito de particulares con afectación al Estado y legitimación de ganancias ilícitas, porque sabe que al hurgar esos temas encontrará que a altas autoridades del Estado que estarían implicadas.
Millares dijo que tanto el poder político del MAS y de la Fiscalía cayeron con toda su fuerza sobre la expareja de Morales, Gabriela Zapata, para hacerla ver como la única culpable del tráfico de influencias. La prueba, dijo, es su sorpresivo traslado a la cárcel Miraflores sin estar habilitada para detenciones preventivas.
Por su lado, la diputada del Partido Demócrata Cristiano (PDC), Norma Piérola, declaró a Erbol que llama la atención que tanto la comisión como la Fiscalía coincidan en afirmar que no hay indicios de tráfico de influencias y que por eso no hay motivo para convocar a las autoridades que firmaron contratos con Camce.
Recordó que la semana pasada, Guerrero dijo que la Fiscalía borró de la lista de acusaciones la figura de enriquecimiento ilícito de particulares con afectación al Estado, porque sabe que en algún momento tendría que investigar a más de un ministro de Estado y para no comprometerse liberó a Zapata ese cargo.
“La comisión se está saliendo por la tangente porque no está investigando nada”, manifestó al denunciar que los miembros de la comisión del MAS “hablan con un libreto que les envían desde el Ejecutivo” para emitir informes donde digan que todo está bien.
Al respecto, el diputado Víctor Borda (MAS) que integra la comisión, señaló que Millares no es parte de la comisión y no conoce del trabajo, pero considera que las críticas expresan “dolor” porque la oposición no encontró indicios de tráfico de influencias.
La comisión fue creada para presentar en 90 días, que corren desde el 23 de febrero, las conclusiones de la investigación sobre siete contratos adjudicados a Camce. La primera etapa fue solicitar información al Ejecutivo, luego de inspecciones que concluyen este fin mes y la tercera etapa se realizará con citaciones a aquellas personas que participaron en los procesos de contratación y en la ejecución de obras y proyectos.
FAMILIA ZAPATA CUIDA A NIETA
La familia de Gabriela Zapata en conferencia de prensa informó ayer, en La Paz, que la hija menor de cuatro años de la exgerenta de la empresa china Camce no está abandonada y está bajo la tutela de su familia materna.
“Queremos demostrar que la niña se encuentra a buen cuidado, no le falta nada, está yendo regularmente al colegio y está cumpliendo con todas las actividades que desarrolla. Nos vamos a apersonar a la Defensoría para ver, para regularizar cualquier situación. Actualmente mi sobrina se encuentra bajo la tutela temporal de la familia hasta que se solucione el problema de mi hermana. Yo soy tía directa de la niña y por lo tanto no pueden decir que está abandonada”, sostuvo María René Zapata, hermana de Gabriela.
La madre de la niña denunció que el Gobierno quiere poner a la niña en un hogar del Estado, para lo que instruyó a la Defensoría de la Niñez de la zona sur de La Paz elaborar un informe.
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