La bancada de Demócratas demostró ayer el poder absoluto que tendrá, al menos durante el primer año de la gestión 2015-2020, en la Asamblea Legislativa Departamental. Lo hizo con la elección de la directiva, ahora presidida por Kathia Quiroga.
Si bien la sesión tuvo demoras imprevistas, por que se esperaba que la elección de la nueva directiva no demore más de 15 minutos, al final se observó cómo el apoyo de los pueblos indígenas ha fortalecido a los 17 legisladores departamentales del frente de Rubén Costas.
Esta alianza de gobernabilidad, suscrita al día siguiente que la justicia absolvió a Costas del proceso penal por la realización del referéndum autonómico, se traduce en una arrolladora mayoría que ayer avanzó sin inconvenientes, ante los intentos tibios de los masistas por tratar de imponer su postura en la elección de la directiva.
Intento fallido
El jefe de bancada del MAS, Edwin Muñoz, tras escuchar la plancha planteada por Demócratas para dirigir la Asamblea encabezada por Kathia Quiroga, pidió que a su partido se le permita tener dos de los tres espacios que le corresponden a la minoría. Pero el oficialismo regional le otorgó esos lugares a los indígenas, sus aliados, y dejó solo la última vocalía para el MAS dentro de la directiva.
“Si no nos respetan se mostrará su actitud antidemocrática”, afirmó Muñoz. Sin embargo, luego de la intervención de los legisladores de Demócratas, que cuestionaron la postura del jefe de la bancada masista y un par de cuartos intermedios, la maquinaria mayoritaria funcionó.
Decidieron no cambiar la propuesta inicial y el presidente de la directiva ad hoc, Alcides Vargas, ordenó iniciar la votación. El MAS, al ver que no aceptarían su propuesta, aceptó ocupar el lugar que Demócratas le dio en la directiva y se negó a ser parte de la elección. Se logró 21 votos a favor, los que se pueden replicar en las próximas sesiones. La mayoría se activó y se señaló que los masistas que no votaron pueden ser enviados a la Comisión de Ética
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